Vanitas, Vino y Venus
Jorge Vallejo
Pintor, restaurador y coleccionista de arte, en su obsesión por conocer los secretos de los maestros recupera obras y las analiza en un pequeño museo personal. Nació en Baja California y se formó en la Escuela Nacional de Artes Plásticas ENAP del 90 al 94, pertenece a la generación que educó el maestro Luis Nishizawa.
Nació el 4 de agosto de 1972 en La Paz, BCS, y estudió la Licenciatura en Artes Visuales en la Escuela Nacional de Artes Plásticas de la UNAM (antigua Academia de San Carlos) en la ciudad de México donde fue alumno de distinguidos profesores como Hermilo Castañeda y Luis Nishizawa.
Perfeccionó sus conocimientos de las técnicas pictóricas estudiando y copiando cuadros de los Grandes Maestros en diversos museos de México y Europa, Ha participado en múltiples exposiciones individuales y colectivas y durante más de 30 años de manera intermitente ha ejercido la docencia de manera particular y en diversas instituciones públicas y privadas en México. La Suprema Corte de Justicia de la Nación expone de manera permanente en su edificio principal seis lienzos del artista que forman parte de la colección “Retratos vivos
Regresando al erotismo, Jorge Vallejo hace un homenaje a Balthus y a sus jovencitas bañadas de sol.
MATERIALES
El manejo correcto de los materiales te va a dar un soporte para tu obra para, que no sea una obra efímera. Si quieres que perdure, tienes que saber cómo preparar un lienzo, tensarlo, preparar una tabla. La expresión se puede tener sin haber estudiado, lo que te va a dar el conocimiento de las técnicas y materiales es sacarles el mejor provecho a tus pinturas, saber escoger qué colores te van a servir y cuáles no, cómo preparar una tela, no estar sujeto a las preparaciones comerciales. Con más opciones, tienes mucha más libertad para expresar lo que quieras y de la manera más cercana a lo que estás buscando.
CONSERVAR LA OBRA Y EL ARTE
Mientras estuve estudiando trabajé en un taller de restauración durante cuatro años y es un enfoque completamente diferente de ver la obra y de explorarla. Se complementan muy bien las dos disciplinas, para restaurar sirve entender la pintura como pintor y para pintar también sirve entenderla como restaurador. Examinar cuadros antiguos como si un médico estuviera operando a un paciente, es un trabajo forense, estar viendo las capas, cómo solucionar un problema, acercarse a la obra antigua, tocarla. La restauración me ha funcionado muy bien para entender muchas cosas de las soluciones que usaban antiguamente los maestros. Hay cosas que parecen muy complejas y en realidad no lo son tanto, pero hay que verlas de cerca. Mientras estaba en la carrera, me gustaba ir a hacer copias a museos, preguntarte cómo solucionó ese pintor un problema es un aprendizaje muy descalificado ahora por esa idea de que tener influencia de otro pintor o “te va a contaminar” o “eso ya está superado”. Creo que entre mejores cosas sepas, mejor te vas a defender en la vida.
ORIGINALIDAD
La tendencia actual es que te dicen “no sirve para nada” o “para qué estás haciendo eso”, estudiar a los maestros y muchas cuestiones de lo que llaman ahora arte moderno se volvió una academia antiacadémica, entonces se cayó en un tipo de inquisición, creen que son vanguardia y están repitiendo cosas de hace 50, 60 años, o de Altamira, de hace 10 mil años. El problema es querer ser original a toda costa, porque la originalidad es algo espontáneo, y querer ser original a fuerza te condiciona a muchas cosas. Salvo muy raras excepciones, es un concepto falso, el ser humano que haya pensado que se le ocurrió algo que no se le haya ocurrido a nadie antes, está mintiendo o es un tonto.
EL ARTE DEL VINO Y EL EROTISMO
Hace poco hubo un episodio con la exposición de Balthus en el MET de Nueva York, un grupo pidió que censuraran la pintura Thérèse soñando y cientos de personas se manifestaron en contra de la obra. El problema es tratar de adecuar el arte y todos los hechos antiguos a la moral actual. Me molestó mucho eso, me alegro de que el MET no les haya hecho caso. Pensé hacer algo provocador, jugar con una imagen de Lolita, de la estética de los 40 que forma parte del hedonismo, el vino es sensual y, al mismo tiempo, el vanitas te lleva al concepto de la fugacidad de la vida, es la flor que está lozana pero se está secando. Hay toda una escuela del vanitas, de naturaleza muerta y cuestiones filosóficas que se relacionan con las ideas cristianas. Hay naturalezas muertas flamencas y holandesas virtuosísimas que sacan el alma de cosas inanimadas, la buscan y la encuentran.
Óleo sobre lino
170 x 120 x 7.2 cm
2018